Washington, 3 feb (PL) Estados Unidos someterá a revisión las regulaciones financieras puestas en prácticas por la administración Obama para enfrentar la crisis de 2008-2009, ordenó hoy el presidente Donald Trump.
«Hoy estamos firmando los principios básicos para regular el sistema financiero de Estados Unidos«, expresó el mandatario desde la Oficina Oval durante la firma del documento, que solicita el análisis de la llamada Ley Dodd-Frank, de 2010.
A juicio de expertos, dicha normativa resultó conveniente, en tanto obligó a los bancos norteamericanos a adoptar medidas preventivas frente a la especulación y a realizar un mejor manejo de sus reservas monetarias.
«Una relajación en la regulación financiera en Estados Unidos cuestiona el enfoque global y presiona al resto de países del G20 para que también adapten sus regulaciones«, estimó Andres Prescher, de la consultora KPMG.
Sin embargo, el vocero presidencial Sean Spicer calificó la ley como «una política desastrosa» que se ha traducido en un obstáculo para los mercados financieros, al reducir la disponibilidad de crédito y la capacidad de crecimiento de la economía.
De acuerdo con lo dispuesto por Trump, el Departamento del Tesoro deberá revisar el cuerpo jurídico, aunque parte importante de los eventuales cambios deberán ser aprobados por el Congreso.
«Esperamos eliminar mucho de la (ley) Dodd Frank, porque sinceramente hay tanta gente, amigos míos que tienen bonitos negocios y que no pueden tomar prestado dinero«, afirmó el jefe de Estado.
«No pueden pedir dinero prestado porque los bancos no les dejan hacerlo por culpa de la regulación de la (ley) Dodd Frank«, añadió el nuevo jefe de la Casa Blanca.
Además, el dignatario suscribió este viernes un memorando para detener la implementación de una serie de reglas del Departamento del Trabajo, por las que los profesionales financieros deberían anteponer los intereses de sus clientes frente a los suyos, en especial en el caso de pensionados.
El líder de la oposición demócrata en el Senado, Chuck Schumer, reprobó las decisiones del gobernante y prometió una fuerte oposición en el legislativo.
«El presidente Trump prometió posicionarse contra los grandes bancos pero ahora deja que ellos dicten las reglas«, indicó en un comunicado.